Debemos saber que la mayoría de los tacos son universales, por lo que sirven para las mayoría de marcas de zapatas. Sin embargo en algunas marcas, como las Campagnolo, por ejemplo, no son compatibles ya que ésta desarrolla sus propias zapatas.
También debemos tener en cuenta que tipo de llanta tenemos ya que existen tacos para llantas con pista de frenado de aluminio y tacos con pista de frenado de carbono (los tacos para carbono son más blandos).
¿Por qué y cuándo cambiar los tacos?
Cuando notamos que el taco se encuentra muy gastado, que ya no tiene canaletas que son las que permiten el paso del agua, es hora del cambio porque seguramente el frenado que tenemos no es el adecuado.
También suele pasar que tengamos las zapatas mal ajustadas y esto causa que los tacos no se gasten en forma uniforme, haciendo que el desgaste sea mayor de un lado que del otro.
Muchas veces solemos cambiar las ruedas dependiendo del viento, de las condiciones del pavimento, de si vamos a hacer escaladas, plano, etc. Es decir, sacamos las ruedas que tienen llantas con pista de frenado de aluminio y ponemos las que tiene pista de carbono o viceversa. Por lo general solemos usar las llantas de perfil bajo en aluminio y las de perfil alto en carbono, haciendo esto sin cambiar los tacos de freno de nuestra bici podemos deteriorar la llanta o el taco.
Dependiendo del modelo y la marca del freno vamos a necesitar una llave Allen o un destornillador Philips y claro está, un par de tacos nuevos!
Una vez quitada la rueda sacamos el taco, retirando el tornillo que lo sujeta. Siempre debemos quitar el taco hacia atrás, ya que del lado de adelante tiene un tope para que cuando frenemos no se mueva ya que la fuerza que aplica siempre es hacia delante.
Cuando colocamos los tacos nuevos debemos tener la precaución de colocarlos en el sentido correcto, por lo general se indican cual es el derecho y el izquierdo, también pueden tener flechas indicando la dirección de las mismas.
Si los tacos que quitamos están gastados parejos en los extremos, no tendremos que ajustar la zapata, pero si notamos que están gastados de forma irregular debemos hacer ajustes en la zapata aflojando el tornillo que la sujeta, notaremos que tiene una arandela cónica, lo que nos permite ajustarla en todos los sentidos.
Dependiendo de la altura de la pista de frenado vamos a subir o bajar la zapata, una vez colocada en el lugar exacto en que la queremos apretamos el freno hasta que los tacos toquen uniformemente la pista de frenado y apretamos el tornillo nuevamente.
Un proceso sencillo, rápido y casi sin ensuciarnos las manos, que no nos de pereza cambiar los tacos, está en juego nada más y nada menos que la frenada.
